American Symphony

American Symphony es un viaje emocional y, en última instancia, una historia de amor y apoyo. Batiste debe aprender a equilibrar sus ambiciones creativas y sus éxitos con sus angustias y preocupaciones por Jaouad. Lo que viene después muestra a los espectadores cómo todo el mundo, famoso o no, debe enfrentarse a los altibajos de la vida. Nadie es inmune a lo que la vida nos depara, y ver a Batiste luchar contra su ansiedad y su insomnio, incluso mientras gana premios y crea obras maestras, es una lección de la humanidad que nos une a todos.

Los fans de Batiste apreciarán el relato íntimo y cercano del año que pasó creando su sinfonía, y a los aficionados a la música de todo tipo les encantará ver cómo funciona el proceso creativo musical. Batiste también da voz a la experiencia afroamericana a la hora de enfrentarse a estereotipos y clichés. Muestra cómo intenta socavarlos, pero también se dirige a sus críticos (al menos en cierta medida). Todo desemboca en un emotivo crescendo de música y sentimiento, que convierte el documental en una experiencia conmovedora.